Hoy el Senado ha debatido una propuesta de reprobación contra el Defensor del Pueblo del Estado, Enrique Múgica. Me sumo a ella. Y lamento que la suma de votos del PP y del PSOE hayan impedido que el cese de Múgica comience a ser una realidad.
Como catalán de adopción y de convicción no me siento defendido por Múgica. Al contrario, su actitud partidista y arbitraria en relación al Estatut del todos los catalanes, no hace más que distanciarme de su figura y cuestionar su rol entre las instituciones de España.
Múgica llegó a su cargo a propuesta de José Maria Aznar. Todos sabemos que para la designación del Defensor del Pueblo se necesita una mayoría importante del Congreso y en su día el PSOE dió el visto bueno. Pero hoy, su figura ha perdido capacidad de consenso. Hoy su comportamiento ha dañado a la institución de forma grave.
Como socialista me siento avergonzado de la actitud de Múgica en relación al nuevo Estatuto de Catalunya. No creo que esté actuando en favor de los ciudadanos y ciudadanas que vivimos en este país. Múgica, de forma deliberada se está sumando a la campaña más feroz de la derecha española contra la convivencia social en Catalunya y contra la buena relación de los pueblos de España.
Pido al gobierno y exijo a mi partido una actitud decidida para provocar un cambio en el cargo de Defensor del Pueblo. Enrique Múgica se apunta a dividir, no a sumar, que es lo que deseamos la inmensa mayoría de los catalanes y sobre todo aquellos que nos sentimos catalanes y españoles, uruguayos.... y ciudadanos del mundo.
Enrique Múgica debe dimitir!!
miércoles, febrero 14, 2007
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