Enhorabuena, Celestino!
Hoy, 14 de abril, el compañero Celestino Corbacho prometerá su cargo de ministro de Trabajo e Inmigración. Llega a una cartera compleja en una coyuntura de crisis económica. Una de las carteras que tiene como cometido atender dos de als grandes preocupaciones de la ciudadania : el desempleo y la inmigración. Es un encargo que pondrá prueba la capacidad de gestión de uno de los alcaldes más emblemáticos de nuestro partido.
Ni España ni Cataluña han resuelto aún, de forma satisfactoria, el encaje de la población inmigrada en nuestra sociedad. La política inmigratoria es incipiente, los recursos (a pesar del volumen importante del que se dispone en los últimos años) aún no han dado sus frutos y los contingentes de personas que hoy vienen a España a trabajar y a vivir padecen importantes déficits para el ejercicio de sus derechos básicos.
Corbacho coge esta cartera en un momento delicado de la economia, con un crecimiento del desempleo y con una retracción del consumo que comienza a ser visible y palpable a nuestro alrededor. Por tanto, su desafío es grande. Deberá aplicarse a fondo para reducir el impacto de la desocupación creciente y los conflictos que estos seguramente generarán.
En cuanto a la inmigración, la situación continúa siendo delicada. La crisis se está cebando ( y no sin crueldad) sobre los contingentes de trabajadores inmigrantes. El gobierno ha anunciado diversas medidas: apoyo a la reconversión profesional, formación ocupacional y ayudas al retorno. Todo puede ser poco, si la crisi arrecia. Pero la tarea que qaún nos falta completar es la de acabar de definir un modelo de integración a la española, basado en una regularización más eficaz, en el tratamiento más humanitario y social de los contingentes más débiles que están ya dentro de España y en una política informativa y persuasiva en el exterior, consolidando la contratación en origen ( fuera) y la reagrupación familiar (dentro)como los ejes vertebradores de las políticas migratorias. Todo lo demás ( acogida, lengua, etc.) es complementario. España está en condiciones, hoy, de poder marcar la pauta política en cómo, cuando y de qué manera se hace política con los inmigrantes.
Mis mejores deseos, Celestino!!
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